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Del D4vë

"La historia de David es colorida, larga y llena de batallas, victorias y derrotas. Mucha de la gente que comenzó el experimento ya no está aki, pero el sueño de una vida en libertad. Ahora, 24 años más tarde, gente de cerca y de lejos todavía se sienten atraída por esa mezcla mágica de anarquía y amor que se encuentra en él."

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capítulo 0120: Other bloody friday's night

Tal vez era la depresion que me daba la vista o el hecho de que estaba despertando de algo, que a ciencia cierta aun no se que es, pero mis ojos ven algo mas.

Quiza si, yo sea un suspiro mas, insignificante, inmesurable e intangible, pero me convenci de que la esperanza de algo mas debia seguir y no era tiempo de perder el aliento.

Soy victima de las circuntancias. Soy un barco ebrio que navenga entre los mares de la realidad y la ignorancia, ¿y que me queda? Nada, mas que seguir intentandolo.

El viernes decidí salir con el buen Lalo,,decidimos salir a bailar, a cantar, a brincar, a conseguir cualquier cosa o evento que pudiera deshacerse de la tensión y las presiones.

Ahí estabamos, rodeados de reinas de la noche, peinados estilo RBD, coreografiás sacadas de la Academia, ropa entallada y ombligos de fuera, pelucas de colores, cigarros y cervezas, musica pop mezclada con el peor gusto y todas las clases identificadas dentro del Neon de Corporativo Cabare-tito.

2hrs. pasaron desde que llegamos a aquel lugar seis cervezas cada uno y mis mejores pasos en las canciones electrónicas, el drum&bass está saliendo del Underground y esta cayendo en lo comercial... se está metiendo a otro hoyo.

La música me estaba aturdiendo, llevaban más de 4 canciones seguidas de Jeans y estaban a punto de cambiar a la Pau... digo, no es lo mismo sin la Thalis. Me acerqué a la barra a pedir otra cerveza, un ligero toqueteo con alguien, un guiño al barman y mi cerveza en la mano. Mi cabeza giró para encontrar alguna carne para la noche, si ya estaba ahí por que no buscar algo de diversión...

Diversión no fué lo que encontré... o no precisamente esa diversión.

Su mirada se conectó con la mía, en ese momento, en ese lugar, luego de que mis dos amores me dejaran para siempre, en el orden de aparición real... ahí estaba el ante mi.

"Linda playera", me dijo... "ah, adelgazaste cierto", contesté.
Luego de frases vanas, dándole vueltas al vaso le dije:

- Estoy seguro que quieres preguntar si tengo novio o algo, o no?
- soy algo obvio
- no esperaba esa mediocridad de la playera
- me gusta la playera
- me pareció una forma de esquivar la incomodidad del momento
- creo que fue una salida poco creativa cierto? Y supongo que estás en una posición de superioridad por que no lo pregunté y tu te diste cuenta, no?
- puede ser
- y ahora usas la sinceridad como recurso de superioridad
- también puede ser...

Me cansé de la platica y le invité una chela, luego ya con más confianza y recordando nuestra relación, con cada mirada ibamos investigando al otro, nuestras palabras s eadelantaban a la pregunta del otro, nuestras historias eran tan parecidas... se tenía que ir...

O tal vez ya no quería seguir con todo eso.

Pero ahí estaba, era Carlos... era Carlos y no sabía exacamente que sentir... nos despedimos, se dio la vuelta y lo sujeté del brazó. Le invité un café para platicar. Aceptó

Las cosas iban mejorando, era como si nunca nos hubieramos separado, como si sólo hubiera pasado un fin de semana, un largo fin de semana. Un fin de semana, de esos llenos de aventuras que te dan demasiado que contar...

Salimos del 219 de la Roma y nos enfilamos a Insurgentes, seguimos por Medellín, de alguna forma tomamos Eugenia y seguiamos platicando y caminando... "me acuerdo de ti demasiado, me enseñaste mucho" decía, "yo también me acuerdo, de hecho, te he soñado últimamente""aún guardo el dibujo y el cómic... el cd" no sabía que contestar y luego recordé "yo aún tengo el perro de peluche que me regalste en reyes y los panditas que me diste jamás me los comí".

Después de perderme en Eugenía dimos vueltas y salimos de nuevo a Insurgentes y nos dirigimos a Churubusco, ambos recordamos una caminata igual en nuestra segundo día de pareja... y al final nos enfilamos por Río Churubusco en busca de Tlalpan.

Las calles las conociamos, nada hab´â cambiado, sólo la construcción donde hace 2 años nos habíamos metido ahora estaba completa. Nos mirabamos, nos mojabamos, la lluvia no paraba y no parecía que fuera a suceder.

Justo frente a la Alberca Olímpica lo dije...

- Tengo ganas de besarte pero...
- ¿Pero?
- No lo haré
- ¿Por qué?
- 1. Debo saber si tu quieres también
2. Debo tomar en cuenta que sólo será un beso y no nos llevará a más
3. Creo que tienes novio... o no?
- Eso es lo de menos, si quiero besarte, desde el antro lo deseo y creo que sería algo complicado por lso tiempos llegar a algo...

Seguimos discutiendo razones para hacerlo, mientras analizabamos razones para no hacerlo. Y así llegamos a Tlalpan.

Luego de una canción que me debía y una charla sobre nuestros planes a fututro nos despedimos y yo comenzé a subri el puente por el que cruzaría Tlalpan y me iría a casa...

Antes del tercer escalón me llamó y me dijo que no quería quedarse con las ganas yo le dije que lo hiciermaos y a la chingada con el diablo como diría Yoko...

Nos besamos... sentía su amno en mi entreperna y la mía en su trasero y entoonces nos separamos, el beso había concluido, el beso que tal vez no quisiera que hubiera concluido.

Amanecí esa mañana sin ganas de amanecer y con muchas preguntas y ni una sola respuesta real. Sin embargo, con el tiempo me di cuenta que cualquier esfuerzo por seguir juntos era en vano. O no?

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